Que Isabel la Caótica tiene un plan, es algo de lo que no me cabe duda, lo que no se entiende es hacia dónde quiere ir.
Por un lado tenemos más de 70 sentencias condenatorias por vulnerar de los derechos fundamentales de los trabajadores, que se dice muy pronto, pero que hay que explicar.
Supongamos, que usted trabaja en este Ayuntamiento, y gana 1000 euros al mes, entra a las 7 am, hace sus “cositas” en su horario laboral, y vuelve a casa con la sensación del trabajo bien hecho.
Pero no es suficiente, una ciudad con 75000 habitantes, tiene que dar servicios y los trabajadores que tiene no bastan para cubrir las necesidades de sus autóctonos y foráneos.
Pues como toda ciudad que se precie,  empieza por llamar a amiguetes y familiares, y como eso es bastante descarado, se propone que pasen un exámen, el exámen se pasa, y en la lista aparecen nombres de amiguetes y familiares ocupando las primeras posiciones para trabajar.
Como decimos en mi casa “fuérese estudiao”.
Se forma una bolsa de trabajo para dar servicio a los vecinos de esta gran ciudad, a los que llaman, haciendo uso de del erario público, un mes o semanas, y cobrando por debajo de la mitad de lo que cobra cualquier trabajador del Ayuntamiento.
Suele ser en época de elecciones.
Se les da la bienvenida con la mano como una polla flácida, y ya está, colocados para un ratito, cómo dicen los jóvenes de ahora, todo muy PEC (por el culo).
Los políticos se acomodan en sus asientos, consolidan sus sueldos, y cuando llega la hora de votar, ganan; resumen, como dicen los jóvenes de ahora, “servir coño”.
Pero la ciudad crece, de la misma forma que crecen las necesidades y la avaricia, y dónde se ganaba 30.000 al año, y ya era un despropósito, se pretende ganar 85000 al año, todo muy socialista y muy obrero.
O como dice el Código Ético y de Conducta del PSOE en su punto 4.6 llamado AUSTERIDAD
La austeridad implica hacer un uso eficaz y eficiente de los recursos, en particular por parte de las personas con responsabilidad en la gestión económica. Se evitarán los gastos superfluos o innecesarios y se justificarán debidamente aquellos gastos de representación o de asistencia a reuniones o actos, incluyendo la manutención y el alojamiento, bajo los principios de adecuación, proporcionalidad y necesidad. Este principio deberá guiar a toda persona que la sociedad pueda identificar con nuestras siglas.
Sí, querido alcalareño y querida alcalareña, a mi también me da la risa flácida.
Por regla general a la gente no les gusta que los engañen, por eso cuando llegan las elecciones hay que hacer algo.
Enseguida aparece el iluminado de turno, que viendo la necesidad de las familias, prepara un plan para atajarla, mira el presupuesto y piensa que 37 millones de euros para pagar los salarios del Ayuntamiento no son suficientes y hay que pedir más al Estado, a Europa, y si hace falta, al padre Ángel.
A las siguientes personas que se contrata, insisto, por necesidad de la ciudad, y por necesidad de las personas contratadas, se les da 500 euros por hacer el mismo trabajo que los de 1000, aplicando el principio de austeridad sobre los de siempre, los más débiles.
Se levantan por la mañana, trabajan sus 8 horas como mandan los cánones y se van a su casa felices, en estado de semiesclavitud o de esclavitud entera.
Un estado un tanto extraño, que te da por pensar, “mejor callado que si no, no me llaman más”
Pues hay más de 70 veces que la gente no se ha quedado callada, que ha dicho lo de a igual trabajo igual salario, y han llegado hasta el Tribunal Supremo, aunque ya sabemos que para el Socialismo de hoy en día, las más altas instancias de la justicia son pura formalidad.
El poder Judicial es un tentáculo de la “fachosfera”, sobre todo cuando actúa, con la ley de la mano, contra la injusticia y el abuso de los “negreros de la new age”.
Isabel la Caótica va a la Primera Instancia, al Superior de Justicia de Andalucía y al Supremo, como quien va a la pescadería, a la peluquería y al Corte Inglés y se deja el dinero de todos, que no es de nadie, en pagar costas y en reconocer que lo que les paga a esos trabajadores temporales no es justo.
Concretamente 163.023,81 euros, en pagar salarios justos de gente que valientemente ha acudido a los sindicatos a pedir amparo.
Todavía queda un poco de dinero para continencias, concretamente 608.540,13 euros del presupuesto, y con todo lo que se viene encima no se si va a llegar.
Porque si no lo saben, ya se lo digo yo, hay unas cuantas denuncias de camino de gente que dice basta a eso de trabajar por la mitad, sin derechos.
Así pues si eres de los que callan por no ofender, Isabel la Caótica te contratará un día de estos, por la mitad de precio, para que barras las cacas de su perro, sólo hay que apuntar en el calendario cuándo son las elecciones e ir acostumbrando a la familia a que sólo se come cuando dice el ama.
Como recordatorio, “igual trabajo igual salario”, no es una canción de Os Resentidos, es una conquista del mundo obrero.
Fernando Viera