La Guardia Civil investiga a 7 personas por vertedero ilegal
No se descartan más detenciones.

Siete personas investigadas por vertidos y quema de residuos en zonas urbanas en Sevilla y Alcalá de Guadaíra
El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil investiga un vertedero ilegal de grandes dimensiones presente entre Sevilla capital y Alcalá de Guadaíra
Se investiga a varias personas por vertidos y quema de residuos sin ningún tipo de control ni autorización. Los incendios creaban una gran columna de humo con gases tóxicos, con riesgo para la salud de las personas y contaminación del suelo y el agua
La Guardia Civil investiga en Sevilla a siete personas por vertidos y quema de residuos en zonas urbanas entre Sevilla y Alcalá de Guadaíra. Esta zona se había convertido desde hace varios años en un gran vertedero ilegal de grandes dimensiones con quemas descontroladas que creaban grandes columnas de humo, con grave riesgo para la salud.
Estas personas han sido investigadas por el Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil por varios delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente.
Los guardias civiles comenzaron su investigación el año pasado tras detectar el aumento descontrolado de un vertedero ilegal en una zona degradada medioambientalmente.
La investigación aporta que en las zonas afectadas existía una red de gestión de residuos al margen de los canales autorizados. El modus operandi consistía en que los investigados, a cambio de una contraprestación económica y actuando como particulares o en nombre de empresas, recogían distintos tipos de residuos de otros puntos transportándolos al lugar afectado.
Una vez allí, almacenaban los residuos sin control alguno, abandonándolos en el terreno. En otros casos, quemaban los residuos para liberar espacio o extraer materiales de valor como metales procedentes de componentes eléctricos o neumáticos usados con el objetivo de ampliar el beneficio económico.
Esto generaba un elevado riesgo de combustión, insalubridad y contaminación del suelo y el agua, así como contaminación del aire a consecuencia de los gases nocivos derivados de la quema de materiales tóxicos o de la descomposición orgánica de los elementos. Todo ello creaba un impacto medioambiental y amenaza contra la salud pública de los vecinos.
Hasta el momento, hay siete personas investigadas, aunque no se descarta la identificación de más responsables en los próximos meses.