Hoy nos vamos a comer a un sitio que sorprende , en una plaza que linda con la entrada a los pinares de Oromana y el cruce que hacemos muchos Alcalareños para ir al parque y, otros muchos mas, que cada madrugada de viernes Santo acompañamos a Jesús al Calvario.
Es un lugar con dos ambientes diferentes , un interior muy cuidado , sorprende hasta el último detalle de los “techos” y una terraza exterior de las que nos gustan a los de aquí, amplia, limpia , sencilla y bien atendida.
Su personal es joven, muy joven y sobre todo muy preparado, me encanta esta juventud formada , que sabe lo que hace y cómo atender a los que vamos a disfrutar de este sitio.
El chef , David Jiménez, Alcalareño, 31 años, de aquí, de Rabesa, formado en la escuela superior de hostelería de Sevilla y en la escuela de Cruzcampo. Nos ha sorprendido el mimo con el que trata cada plato, el conocimiento de cada uno de sus ingredientes, de sus setas, de su carne , de su chocolate, de sus vinos… este chef es un estudioso de cada una una de sus exclusivas creaciones y que podemos disfrutar en su “rincón” especial.
Al llegar , para irnos preparando nos tomamos una manzanilla en rama pasada “de la Pastora” , no solo te tomas una, fresquita es un espectáculo.
Empezamos con:
Croquetas cremosas de buey
Saben de verdad a carne de buey, echa de buey gallego, la textura de bechamel es muy ligera , suave y cremosa , te quedas con ganas de repetir .
Seguimos con las Croquetas de trufa y setas, para los amantes del sabor de la trufa, como yo, es para pedirle una docena y llevártelas a casa, al igual que la de buey, la textura es muy suave , te “explota” el sabor en la boca.
Continuamos con las Patatas bravas con dos salsas , una de tomate casero con kimchi y otra de alioli casero de Kimchi y cebolla frita. Para comer con los dedos , no nos hicieron falta los tenedores porque se te van las manos.
Es pedir dos platos en uno
El corte de la patata sorprende , gajos alargados y esponjosos
El sabor es largo , no hay dureza en las salsas y el gusto va en aumento desde el primer bocado .
Pedimos una carne , la acompañamos del vino recomendado , un Sembro 12, botellas numeradas y con una suavidad en boca perfecta para acompañar a la carne de Ternera Charra, de seis años de edad, que viene de Salamanca. Come bellota 5 años y tenia 6 de vida.
La visión es de una ternera más fuerte y no es así, la maduración la hace más suave al paladar y se distingue el sabor por zonas, para los amantes de la carne exclusiva pedidla, no sobra nada .
De postre nos comimos un brownie con gelato de pistacho , en algún momento tenia que aparecer el toque italiano de la familia de Gianni , y que toque con más precisión y gusto. El gelato de pistacho casero es una barbaridad y el chocolate es muy, muy suave , por cierto, te ponen una onza de chocolate reconocido como el mejor del mundo, pedidla , y no os digo nada más .
Como recomendación , tenéis que ir Gianni Tapas, la relación calidad/precio es muy buena en la carta, eso si , la exclusiva de las carnes tiene su precio y disfrutas de platos de autor sin tener que salir de Alcalá, y sin pagar tanta marca. Se aparca bien y la variedad de su carta da para gustos muy variados. Hay que ir y volver y volver.